El acabado que obtenemos con el hormigón impreso no sería tan estético ni tan duradero si no se usara una resina especial como paso final. La resina para hormigón impreso es un paso complementario pero muy importante y aquí te contaremos todo lo que necesitas saber sobre este tratamiento para revestimientos.
Qué es la resina para hormigón impreso
La resina es un tratamiento de origen orgánico que se agrega como recubrimiento final a obras de decoración y construcción. Este elemento se extrae de árboles pertenecientes al tipo conífera, y luego se procesa y se convierte en una solución que no endurece. De esta solución derivan otras como los barnices y la misma pintura.
La resina es muy demanda en cualquier tipo de construcción, pero es imprescindible sin duda en la instalación de hormigón impreso. Y fuera de esto, el uso de la resina parece expandirse cada vez más; actualmente se utiliza para fabricar papel, algunos tipos de adhesivos, esmaltes, impermeabilizantes y más.
Pasos para aplicar la resina sobre el hormigón impreso
- Prepara la superficie para la aplicación. La superficie debe estar limpia y desengrasada (se recomienda el uso de desengrasante). También se puede cepillar para que todo esté seco y completamente limpio.
- Se debe buscar un acabado uniforme y para ello se recomienda usar un rodillo para aplicar la resina extendiéndola por todo el hormigón impreso. Es como pintar el hormigón impreso.
- Se deben aplicar dos capas muy finas para que sellen bien y se adhieran bien al hormigón. Cuando esté seca la primera capa (esto debes comprobarlo a través del tacto) se aplica la segunda.
- Debes dejar secar la aplicación de resina de 24 a 48 horas (de acuerdo al clima y las condiciones de humedad del lugar) y luego de eso, naturalmente la superficie relucirá un brillo bonito que además realza el color y los diseños del hormigón.
Ventajas del hormigón impreso con resina
La resina para hormigón impreso no tiene un uso accesorio, es decir, no es solo para dar un acabado más atractivo, sino que su implementación es estrictamente funcional. Entre las ventajas que proporciona a los suelos de hormigón impreso tenemos:
- Ofrece protección a la superficie sellando el estampado y los colores aplicados para que duren mucho más.
- Aporta mayor resistencia al hormigón ante la lluvia, los rayos UV, la nieve, la humedad y otras condiciones medioambientales.
- Potencia la aplicación del hormigón impreso y lo hace lucir como nuevo durante un período de 5 a 6 años.
- Facilita el mantenimiento del suelo porque no retiene polvo, no se mancha, impermeabiliza, resiste las manchas de aceite o gasolina y en definitiva ofrece una capa de protección contra la suciedad.
- Su aplicación es muy sencilla, solo se debe ser cuidadoso y metódico para que quede uniforme.
- La resina alarga la vida útil y la apariencia estética del hormigón impreso. Su coste es muy bajo y solo tienes que renovarla pasados 6 años. Alternativamente, protege al suelo de todos los daños posibles, por lo que es un elemento agregado de alta rentabilidad.